- May 19, 2015
- Pedro Vargas
- Padres, Respiratorio
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Hay 3 presentaciones clínicas que aterran a los padres porque tienen la impresión de que el niño «se les ahoga» o «se les muere». Una de ellas es el croup espasmódico o croup agudo. Las otras dos son las convulsiones y el evento agudo que parece muerte o ALTE, por sus siglas en inglés (Apparente Life Threatening Event), que ocurre con el reflujo gastroesofágico.
El croup espasmódico es producido por un edema de la laringe, debajo de la glotis, la entrada a la tráquea, generalmente como una reacción alérgica o por razones psicógenas. En ocasiones se debe sospechar un episodio de reflujo gastroesofágico. En otras ocasiones puede haber una infección viral, pero no es lo usual, como es lo usual en la laringotraqueítis o en la laringotraquebronquitis, también conocida como croup.
El croup espasmódico suele presentarse cerca de la medianoche -antes o después- o en las primeras horas de la madrugada. El niño se despierta, no pocas veces asustado, y despierta a los padres, también asustados.
Se presenta con tos súbita, fuerte, metálica o ronca y con el esfuerzo respiratorio produce un ruido ronco al pasar el aire por la laringe, el estridor laríngeo, que es el que sugiere a los padres obstrucción respiratoria. No hay fiebre o muy rara vez.
El croup espasmódico no mata, no importa lo que haya Ud. oído. Y suele ocurrir solo una noche. La laringotraqueítis viral o laringotraqueobronquitis, por lo contrario, presenta por varios días ronquera y estridor laríngeo, como también persiste una «tos de perro» o «tos de foca».
El croup espasmódico suele ocurrir en los primeros 3 años de vida y generalmente no hay un pródromo de fiebre o enfermedad viral respiratoria, como si se observa en la laringotraqueítis, también llamada croup.
Es importante diferenciar el edema epiglótico o supraglótico, una condición bacteriana aguda, muy rara hoy día gracias a la vacunación infantil contra la infección respiratoria por el Haemophilus influenza y de seriedad eminente, del edema subglótico del croup y del croup espasmódico. En casos severos con cianosis y marcada dificultad para respirar, es necesario tratar y descartar una epiglotis aguda en el cuarto de urgencias de un hospital.
El manejo del croup agudo puede hacerse en la casa: abra la llave del agua caliente en el baño y cuando haya vapor de agua acumulado en el cuarto del baño, entre con su niño a respirar allí. Usualmente se va calmando rápidamente. Dele apoyo emocional. No se ponga a gritar o a llorar con él. Sáquelo del susto. Si no cuenta con agua caliente puede salir a «respirar el sereno». El aire húmedo de esas horas de la noche o madrugada, también humedece las vías respiratorias y mejora el cuadro clínico.
Si no observa mejoría entonces consulte a su pediatra o llévelo a un cuarto de urgencias para que se le evalúe y reciba tratamiento farmacológico, si es necesario. Es conveniente que, de todas formas, lo evalúe su pediatra al día siguiente, aunque ya se le vea «sano y salvo». El croup espasmódico rara vez recurre inmediatamente, pero puede ocurrir aunque ya menos dramático y severo.
Ahora, respire profundo.